13 agosto, 2008

Gnarls Barkley

Hace bastante tiempo, mucho antes de que la canción se pusiera de moda (mi maldición, todo lo que me gusta se pone de moda, la gente lo coge, lo emponzoña y listo), puse en este mismo blog la canción Crazy de este grupo. Es un temazo, una pedazo de canción que pasará sin duda a la historia de la música. Pero estos tíos son un claro ejemplo de grupo que se eclipsa a sí mismo.

La primera vez que escuché Crazy me enamoré, me fascinó la voz, el ritmo, todo... Conseguí el disco, lo puse, y terminé con una tremenda decepción. Así que los abandoné, vilmente además. Pero hace relativamente poco, y viendo que tenían otro disco en el mercado, me decidí a darles una segunda oportunidad. Joder, los tipos que habían hecho Crazy no podían cagarla tanto después... Y menos mal que lo hice.

Llevo varias semanas, sí, semanas, sin poder parar de escuchar los dos discos, brutal. La primera vez que escuchas todas las canciones tienes esa sensación de que querías más Crazy y no te lo han dado, y las demás no valen nada. La segunda vez empiezas a distinguir algún acorde que está bien, un par de sonidos por aquí y por allá, el ritmo de alguna canción... La tercera vez ya te has enamorado de alguna otra canción, y a la cuarta... uf, si llegas a la cuarta ya no hay vuelta atrás. Son dos discos increíbles, llenos de registros, con canciones tan diferentes como auténticas. Coquetean con mil estilos de música sin definirse por ninguno en concreto, con mezclas y más mezclas y les han salido dos pedazo de joyas.

Además, yo tengo un problema (por llamarlo de alguna manera) con la música. Desde hace tiempo escucho música y leo exactamente en los mismos momentos, los viajes en transporte público. Y tiendo a repetir una y otra vez el mismo disco mientras me dura el mismo libro. Así que, al final, acabo asociando melodías a lecturas, y cuando escucho una canción, me viene a la memoria un libro, invariablemente. A Gnarls Barkley le ha tocado Canción de Hielo y Fuego, y sí, puede parecer una mezcla rara, pero joder, queda de puta madre... Afortunadamente, aún me quedan dos libros para terminar de releer lo que por ahora está publicado, así que disfrutaré mucho aún de los dos discos que más me han gustado en mucho tiempo (si quitamos a The Last Shadow Puppets, dios, qué discazo también!!!!).

Y mañana, a León :). A por mis coros. Los sacristanes de la catedral ya me esperan y yo siento que todo esto me queda grande, pero bueno...

No hay comentarios: